Recuerdan que nevó en Poitiers el Jueves de la piñata no?.. Pues el viernes que tomé mi bus a Nantes, después de unas 3 horas de camino, por fin llegué, se suponía que Claudia otra asistente, iría por mi. Mientras llegaba la esperé en la estación de trenes (Gare). Lo malo de estos franceses es que la lógica no les funciona muy bien que digamos, las estaciones de tren no tienen calefacción, o son de plano al aire libre, o si tienen calefacción pero las puertas son muy grandes y están en constante apertura. Después de tanta explicación sobre la estación, es preciso que les diga que pasé 3 horas esperando a Claudia por que se perdió, mientras yo pasaba frío, re-desayuné, y parlé con todo el que se conectaba en messenger. Gracias a Dios mi cel tiene messenger y me ayudó a matar el tiempo, de otra manera no sé que hubiera hecho! Angélica debería de llegar a la estación tres horas despueés de mí, y llegó! Y claudia? Sí, seguía perdida.
Cuando Angie llegó me preguntó donde estaba y que había cerca de mi, y le contesté "la verdad angie, no sé, tengo muucho frío y te juro que ya no puedo ni moverme para ir a buscar una referencia, la gente está comiendo paninis, pero no sé donde los compran" Aproximadamente 5 mins más tarde, Angélica me encontró congelada y me rescató. Resulta que si estaba en la estación que Claudia conocía, sólo que estaba en una salida diferente, si hubiera sabidooooo me voy a la otraaa y me hubiera tomado un gran chocolate caliente, y hubiera pasado menos frío porque allá había más gente y calefacción! jJAJA El resto del día lo pasamos en el depa de Claudia tomando té como abuelitas y platicando, que otra cosa podíamos hacer. El sábado lo pasamos en el centro de Nantes buscando la manera más fácil y económica para llegar al AEropuerto a las 7 de la mañana para tomar el vuelo a Milán. Lo más fácil fue tomar el taxi, por que el servicio de tranvía empieza más tarde.
Desde el sábado me pegó una leve gripe causada creo por el severo enfriamiento que sufrí en la gélida estación de Nantes, así que así volé a Milán, acompañada de un paquetín de kleenex.
À la prochaine...
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